En España, generalmente consideramos a una persona como “mayor” a partir de los 65 años, la edad de jubilación aproximada. Aunque está claro que a medida que avanza la esperanza de vida se está imponiendo otra nueva visión, sí que es cierto que es a partir de cuando una persona deja de trabajar, se producen en su vida una serie de cambios físicos y psicológicos que determinan su día a día.